La saga BioShock sigue ampliandose, y ahora llega el esperado juego que completa la trilogía pero con un cambio radical de ambientación. Desde las profundidades de Rapture llegamos a la ciudad voladora de Columbia donde viviremos una aventura única de corte shooter y con la compañía de Elizabeth, una joven con poderes misteriosos para controlar unos portales interdimensionales que será la piedra angular de la trama.
A diferencia de otros FPS centrados en la acción, en BioShock Infinite también tenemos una trama increíble llevada adelante mediante increíbles diálogos y escenas que se combinan con una ambientación maravillosa y algunos de los diseños de personajes y enemigos más potentes de la saga.
Nuestro protagonista es Booker Dewitt, un investigador privado que llega a la ciudad flotante de Columbia en busca de la joven Elizabeth, pero no es el único que busca a la muchacha. Comstock es el líder de una secta religiosa de gran importancia en el mundo de BioShock Infinite y su relación con la joven y sus poderes son clave para entender la trama del juego.
Pero más allá de la historia, de la cual no podemos hablar demasiado para no arruinarla a los nuevos jugadores, lo que realmente sorprende y alegra en BioShock Infinite es el desarrollo de personajes, el diseño de los escenarios y la acción trepidante que se sucede entre disparos y poderes especiales, en esta versión llamados vigorizadores.
Elisabeth también ayudará en los combates, si bien la joven no pelea, si explorará el escenario buscando municiones y otros objetos que nos pueden ayudar a seguir en pie. En más de una ocasión activará trampas o hará algún movimiento que atraiga la atención del enemigo dejando lugar para que realicemos un disparo certero.
¿Estás listo para descubrir la verdad detrás de la ciudad de Columbia y las facciones que se mueven en las sombras para mantener el control de los fanáticos religiosos?
