Vuelve uno de los espías más famosos de los videojuegos, Splinter Cell: Blacklist marca el regreso a la acción de Sam Fisher, el principal rival de Solid Snake en una época donde los juegos de acción y sigilo eran moneda corriente.
Blacklist es la sexta entrega de la saga Splinter Cell, una de las tantas franquicias que Ubisoft ha sabido convertir en legendarias gracias a un trabajo excelente en materia de tramas, jugabilidad y apartado gráfico. Por supuesto, algunos juegos fueron mejores que otros, pero nunca es tarde para volver a traer con gloria a Sam Fisher a las consolas, tiene una gran legión de jugadores esperandolo.
El nuevo Splinter Cell: Blacklist puede dividirse en dos partes, por un lado la campaña principal que tiene todos los ingredientes para convertirse en un nuevo clásico del agente especial, y una modalidad en línea que incluye modo cooperativo o el divertido modo Spies vs Mercs para batallas épicas contra nuestros amigos y otros jugadores a través de Internet.
El modo cooperativo es verdaderamente excelente porque nos obliga a utilizar todo tipo de tácticas y estrategias para avanzar en las diferentes pantallas, aprovechando a un aliado para remates silenciosos y diferentes maniobras de distracción. A primera vista puede parecer más sencillo burlar a los guardas y enemigos con la ayuda de un compañero que haya ruidos y distraiga la atención, pero la dificultad de Blacklist va más allá, con una gran inteligente artificial que se encargará de hacernos la vida imposible en cada pantalla.
Y en cuanto a la modalidad Spies vs Mercs, al igual que en entregas anteriores ofrece algunos de los combates con armas de fuego más divertidos del mundo en línea. ¿Quieres ser un agente especial en una misión donde tienes licencia para matar? Conviértete en el nuevo agente 007 en Splinter Cell.
